Herido de amnesia

*Velvet sonríe y cierra la puerta cuando ella sale. Vuelve a la cama y se tumba, dejando la sábana sobre sus piernas y su vientre. Coloca un brazo sobre sus ojos, tapándolos, y deja que Morfeo se lo lleve un buen rato, intentando no pensar en lo que quiera que le ha podido ocurrir*

- Vengo de aquí -----> https://zodia.forosactivos.net/hospital-general-de-zodia-f54/herido-de-amnesia-t63-75.htm#927



*Lagartija se baja del autobús, justo delante de las puertas acristaladas del hospital. Tiene que torcer el gesto; su fino olfato percibe olor de vida, muerte y recuperación. Se marea un poco. Un gusanillo fastidioso le corre por el estómago.*

Velvet, qué ganas tengo de verte.

*Entra y, después de repasar por enésima vez su plan ensayado, se apoya con un gesto grácil en el mostrador de recepción y sacude su melena.*

Lo hago por ti, caballito.

- Hello, my darling *le dice a la enfermera.* (acento anglicano bien conseguido) Excuse me, soy Linda DeLonghi, y estoy buscando al famosísimo modelo Velvet. ¿Puede decirme dónde se encuentra? Es que, of course, en cuanto me he enterado, so terrible, he venido corriendo. Oh, ¿puede darse prisa? Es que, you know, no tengo mucho tiempo.

*Velvet se revuelve un poco en la cama, en sueños. Mientras en el mostrador, la chica que atiende le indica amablemente el número de habitación de Velvet, y le señala tanto los ascensores como las escaleras*

- Thank you, my sweetie! Bye-byeeee! *se despide, agitando los dedos.*

*En el ascensor, el gusano se convierte en una anaconda. La están matando los nervios, y el miedo. Cruza los dedos para que de verdad no sea nada, para que esté bien. No soportaría encontrárselo lleno de cables, inconsciente o...*

No, no, ¡cállate! Cállate, cállate... Sólo un golpe.

*Su habitación es fácil de reconocer. Desde la salida de los ascensores se puede ver el pasillo, y a cerca de 10 ó 12 mujeres apretadas en una puerta*

(resoplido)

Odio la raza humana.

*Intenta contener su nerviosismo. Cuando sale del ascensor, se da cuenta de que ha derretido el bajo de acero del espejo. Se escurre fuera y retoma su caminar de modelo profesional y su atusamiento de melena.*

- Enough, young ladies! *chasquea los dedos y muestra su perfil más seguro.* Fuera, fuera, pequeñas, out! Mi pobre, pobre muchachito necesita descansar. C'mon, out!

*Las enfermeras la miran incrédulas*

- ¿Y tú quien eres? si su novia se ha ido hace rato...

*Lagartija esboza una sonrisa ihnumana y arrebatadora.*

- Sorry? Who I am? *se acerca a la enfermera, que es más alta que ella, y se coloca a dos centímetros de su nariz.* Soy Linda DeLonghi, my darling. Una muy buena amiga. My gorgeous luce terriblemente bien mis trajes de chaqueta.
- La diseñadora... *cuchichean las demás*

Su... novia... (escalofrío)

*Lagartija agradece que su compañero de piso tenga un traje de DeLonghi, porque es la única que conoce. Chasquea los dedos en la misma nariz de la enfermera.*

- Out!

*Las enfermeras se alejan a regañadientes, y dejan libre el hueco de la puerta de Velvet, que está abierta.

Él descansa en la cama, con los ojos cerrados, y hasta donde se le ve -la cintura- va desnudo*

*Lagartija entra, cierra y echa la cerradura. Le saca la lengua a la puerta y se da la vuelta despacio. La estúpida anglo-parlante se queda fuera. Ahora sólo está Lagartija.*

(suspiro contenido)

*Al principio, no ve nada extraño. Sólo... parece dormido. Ni cables, ni sondas, ni nada extraño atravesando su piel. Casi parece que esté en el sofá de su casa.*

Ese sofá que yo quemé... ¿por qué todavía no me odia?

*Se apoya en la pared y se muerde el labio. Acaba de darse cuenta de lo guapo que está cuando duerme.*

*Respira tranquilo, con un brazo aun sobre los ojos. La sábana que le cubre las piernas se mueve levemente cuando respira*

*Lag sonríe. Lo mejor será que se vaya, que lo deje descansar. Su mirada pasea por la habitación y arruga la nariz.*

Qué sosa.

*La ventana tiene una persiana que deja entrar la luz nublada. Se acerca para comprobar qué tan alto están. Necesita moverse. Todo su cuerpo es calor. Se pone de puntillas para intentar ver el suelo.*

*Velvet se revuelve en la cama, y tiembla, arrebujándose en la sábana, acomodándose. Se queda de espaldas a Lagartija, y se ve el hematoma que cubre toda su espalda*

*Lagartija da la vuelta de un brinco cuando lo escucha moverse. Se agarra muy fuerte al alféizar de la ventana y espera, petrificada. Pero Velvet sigue durmiendo, sólo se ha dado la vuelta. Afloja los dedos. La madera blanca donde antes estaba está carbonizada, pero no se da cuenta.
Sólo tiene ojos para el negro hematoma.*

- (susurro) Velvet...

*Está medio dormido, y abre los ojos, revolviéndose. Se estira, y los músculos de sus hombros se colocan provocando un sonoro crujido*

*Lagartija no se da cuenta de que abre los ojos -o lo intenta, vaya-. Se acerca muy despacio, con las manos atrás. Tiene miedo de volver a herirle. El precioso tatuaje apenas se ve.
Traga saliva. Se le humedecen los ojos.*

- Cómo he podido hacerte esto... a ti...

*Estira la mano, pero no llega a tocarle la piel. Toda ella irradia calor.*

*Velvet escucha voz a su espalda y se gira en la camilla. La mira, y sus ojos la escrutan intentando averiguar quién es. No. Definitivamente, no sabe quién es*

- ¿Quién eres...?

*Lagartija retira la mano. Esboza una sonrisa, la más tierna que tiene.*

Tu voz... ¡qué bien!

- Tranquilo, caballito, sólo soy yo. Hubiera dejado entrar a alguna de tus admiradoras, pero desde luego era firmar tu sentencia de muerte *se ríe a medias. De reojo, sigue mirando el hematoma.* ¿Cómo te encuentras? ¿Estás bien? Si no tienes nada, a lo mejor te mandan a casa pronto. Así podría ir a llevarte algún que otro café, a arreglarte la piscina... Estaría bien, ¿no?

*Velvet hace una mueca de no entender nada*

- Espera, espera... *hace un gesto con las manos, para que se detenga*

- No sé de qué estás hablando, ni siquiera sé quien eres... Así que no veo la razón por la que deberías venir a mi casa...

*Lagartija arquea la ceja.*

- ¿Qué? Velvet, soy yo. Soy Lagartija.

*A Velvet le da un pinchazo la cabeza. De repente se acuerda de un vaso verde, con un café humeante dentro*

- No conozco a nadie que se llame así

*Ladea la cabeza.*

- ¿Cómo?

- ¡Que no sé quién eres! *eleva el tono de voz, frustrado. Le ha empezado a doler la cabeza a horrores.

Se iergue, y en su cuello se ve una herida sangrante en negro, un líquido espeso que desciende por su clavícula y su pecho*

*Lagartija se echa para atrás y se pega a la pared. Tiene ganas de vomitar. Se tapa la boca con la mano, porque de verdad tiene una arcada. Se le empañan los ojos. Las manos van a estallarle en llamas. Se le termina el aire. Lo mira, en un desesperado y último intento.*

- Velvet, soy Lagartija... (al borde del llanto) ¡Tienes que acordarte de mí...! *La pared se aboya por el golpe del puño ardiendo.*

*Velvet la mira, incrédulo. raga saliva. No sabe quién es esa chica. No sabe qué está haciendo. No sabe qué quiere hacerle*

- No sé quien eres *Repite, en voz baja*